jueves, 1 de septiembre de 2011

DECLARACIÓN PÚBLICA Nosotros Los Estudiantes Chilenos exiliados por la educación nos manifestamos






Hoy, 25 de agosto en representación y apoyo cientos de miles y miles de familias chilenas que han respondido con entusiasmo al llamado de paro nacional convocado por las distintas agrupaciones sindicales, sociales y estudiantiles.

Nosotros, desde San Juan Argentina Nos sumamos en apoyo a la lucha estudiantil y social Que se está Produciendo en Chile, como también lo hacen compañeros en todo el mundo diciendo fuerte y claro “Educación pública, laica y gratuita y al servicio de los intereses del pueblo chileno ahora”. Y lo hacemos con gran entusiasmo acompañados por hermanos de todas las latitudes de América Latina que nos han brindado su apoyo.

Este movimiento representa valores y exigencias que transgreden fronteras y gobiernos, que defiende lucha contra un sistema injusto, que denigrante la vida del pueblo chileno a favor del lucro de unos pocos. Venimos acá como jóvenes estudiantes, pero también como exiliados. Esta palabra expresa una condición impuesta de manera implícita cuando nos obliga a elegir entre un vida esclavizada por las deudas, o el abandono de nuestros hogares, amigos y familiares para buscar en otras tierras aquellos derechos fundamentales que el estado de Chile no garantiza.
Entendemos ésta como la Gran Realidad de más de 3000 jóvenes que han cruzado la cordillera de los Andes para poder vivir sin el temor de un futuro agobiado por los bancos, sin la humillación de abandonar su vocación para elegir una carrera rentable, sin la necesidad de tener que disciplinar sus ideas bajo la lógica mercantil de la mala educación. Es también la realidad de miles de hermanos colombianos, Peruanos, Bolivianos y muchas otras nacionalidades que experimentan situaciones similares y alzan su voz para decir: ¡Ya basta!

El Estado chileno ha demostrado ser incapaz de garantizar nuestros derechos plenos. Primero arrojándonos de sus fronteras, privándonos de voto y decisiones en la vida pública, y luego castigando a nuestros compañeros con la más brutal represión usando todo el rigor de las fuerzas de orden. Hoy, el Estado de Chile ha sido desenmascarado por los estudiantes: su verdadero rol ha sido de aliado de los grupos de poder económico, juntos dejando a la gran mayoría de los chilenos en un total desamparo.

La amplitud de las movilizaciones recientes refuerza la realidad de que la sociedad completa está disconforme con las formas de relación del poder, institucionalizadas por la Constitución de 1980 implantado por la dictadura militar y perpetuadas durante los 30 años posteriores a su firma, tanto por los gobiernos de la concertación como por el actual gobierno de Sebastián Piñera. Reconocemos que la actual situación que vive el país responde a un proceso socio-cultural de emancipación, imprescindible en el Chile post-dictadura. Hemos sido testigos de cómo los bienes mínimos fundamentales para la vida de cualquier ser humano como salud, educación, vivienda, trabajo digno y los recursos naturales han sido sistemáticamente arrebatados y puestos al servicio del enriquecimiento de elites económicas, nacionales e internacionales, truncando las posibilidades de construir una sociedad justa, igualitaria, inclusiva y solidaria, reproduciendo así las profundas desigualdades por todos conocidas. Queremos destacar el accionar de la juventud chilena, articuladores de un movimiento que ha puesto en jaque las lógicas del sistema neoliberal y ha desencadenado esta verdadera primavera del nuevo siglo. Su valentía es el motor del cambio para nuestras sociedades. Su organización, el pilar para poner en acción dichas transformaciones. Particular preocupación nos generan los jóvenes en huelga de hambre, actores políticos que nos están dando un constante ejemplo de convicción, compromiso y capacidad para llevar hasta las últimas consecuencias sus principios. Además desnuda la nula voluntad de la hegemonía política de acceder a nuestros reclamos, la sorda monotonía con que esquivan lo exigido.

Le preguntamos al gobierno:

¿No son acaso 38 días sin comer suficientes para legitimar las demandas de la población chilena?

¿Qué están esperando para reconocer la urgente reestructuración que nuestra sociedad necesita?

¿Cuántos días más deben arriesgar su vida los secundarios de Buín para que se escuche la voz de una generación completa?

Nuestra motivación no sólo reside en cuestiones financieras; es para construir un Chile en donde la igualdad sea realidad y no palabra, donde los derechos no sean privilegios y donde las estadísticas no arrojen más de 6000 chilenos exiliados por la educación, repartidos en todo el mundo, buscando lo que el estado no quiere darles. Ampliamos nuestra necesidad de unidad no sólo en Chile sino en toda Latinoamérica: los estudiantes de diversos países están hoy movilizados para detener los intentos de privatización y defender la educación pública en todo el mundo, en Colombia cada día más se agudizan las medidas neoliberales y la mercantilización de su educación, solidarizamos con los compañeros que luchan en su patria al igual que repudiamos lo que está sucediendo en Honduras, la Represión y las Muertes de nuestros compañeros, que en el día de ayer se les sumó uno más a la lista, solamente por luchar por un país Mejor. Formamos parte de todas esas voces, de todas esas manifestaciones, por conocer en carne propia lo que significa la mercantilización y despojo indigno de nuestras vidas libres. Nuestro llamado es, y lo recalcamos, a la unidad. Llamamos a no detenernos hasta alcanzar lo exigido, y avanzar hasta el cambio del sistema económico y político, donde todos seamos actores en acción por la creación del país que soñamos tener. Invitamos con humildad a todos a conocer nuestra realidad, a difundir la verdad, derribar los mitos y a manifestar apoyo desde las más diversas formas, organizaciones y sectores.

Pedimos a las organizaciones de derechos humanos que apoyen nuestro reclamo y exijan, junto con nosotros, derechos fundamentales históricamente negados para nuestro pueblo. Hagamos que estos oscuros últimos 38 años de Chile cambien por un futuro de alegría, de esperanzas y de sueños, donde el desarrollo de todas las áreas busque un país de todos, que nos permita decidir activamente con la más absoluta libertad y no condicionados por las prohibiciones exclusivas del mercado. ¡Construyamos con nuestra educación y nuestro trabajo el camino donde nuestra generación y las siguientes podrán caminar libremente!

¡¡Viva Chile, Viva Argentina!!

¡¡Y que vivan todos los estudiantes del Caribe y Latinoamérica Unida!! Jueves 25 de Agosto 2011

Estudiantes Chilenos Exiliados Por La Educación En Argentina Regional San Juan

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